2 febrero, 2018

 

“Me hubiera gustado ser abogado. Es la profesión más bella del mundo”

Voltaire (1694 – 1778)

La abogacía no es la típica profesión que balbucea tu hijo cuando le preguntas qué quiere ser de mayor. Según la XIII Encuesta elaborada por Adecco, los niños quieren seguir siendo de mayores futbolistas y policías, y las niñas profesoras o doctoras, pero por primera vez también muchos aspiran a ser youtubers o influencers.

No cabe duda que la abogacía juega un papel fundamental en nuestro Estado de Derecho, sin embargo, la figura del abogado siempre ha estado cuestionada, sobre todo, por la eterna lucha entre el abogado y la verdad. Al defender en un juicio dos abogados dos tesis contrarias, parece que uno de los dos podría sostener una falsedad. Sin embargo, hay que señalar que en las reglas de nuestro sistema judicial, el descubrimiento de la verdad corresponde al  juez y el abogado se encarga de la defensa. Por esta razón nos planteamos, ¿qué le llega a nuestra sociedad del sector de la abogacía?

La abogacía en el cine

Desde el principio de los tiempos cinematográficos han existido películas que muestran las bondades, o no tanto, del sector jurídico. Generalmente estos filmes son norteamericanos y reflejan una circunstancia penal como en “12 hombres sin piedad”, “Testigo de cargo”, “Matar a un ruiseñor” o “Anatomía de un asesinato”. Y con razón, esta temática es la más excitante para plasmar en la gran pantalla y la más armoniosa en su lenguaje.  En este sentido  recuerdo haber leído recientemente  un maravilloso artículo titulado “Elegantia Iuris” sobre la belleza en el lenguaje del delito. “La elegancia de la semántica arcaica proporciona a los términos legales una estética que nos puede pasar desapercibida por la reincidencia con la que nos hemos acostumbrado a oírlos. Habituados a comer con el cohecho y cenar con la malversación, tal vez no reparemos en la armonía de estas palabras. Si nos detenemos a observarlas en su forma, despojadas de su significado y aplicación jurídica, descubrimos la poesía del léxico del delito”.

La figura del abogado ha sido interpretada en los últimos tiempos por actores tan populares como Keanu Reeves en “Pactar con el diablo”; Tom Cruise en “Algunos hombres buenos”; Susan Sarandon en “El Cliente” o Richard Gere  en “Las dos caras de la verdad”. Sin embargo, no debemos olvidarnos del criminalista más sarcástico de la historia del cine, Sir Wilfrid Roberts, en Testigo de cargo” ; de la dignidad moral de Atticus Finch enMatar a un ruiseñor”;  o del decadente Frank Galvin en “Veredicto final” evitando chantajes económicos.

Y ya que estamos en el mes de febrero, que es el mes de los abogados, desde Martín Molina, les rendimos un pequeño homenaje, porque los abogados también pueden tener una vida llena de emociones digitales como los admirados youtubers o influencers. De hecho, el uso de las redes sociales está calando rápidamente en el sector jurídico y tres de cada cuatro colegios de abogados utilizan redes sociales.

 

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Comentarios(11)

  1. comment Marta Pérez says

    muy interesante, gracias

  2. comment Carlos says

    Muu buen artículo

  3. comment Shila says

    Buenísimo el artículo …
    Gracias

  4. comment Veronica says

    Me parece fantastico este homenaje… De hecho las buenas pelis siempre tienen una buena trama de abogados ( y no se influencers)

  5. comment Beatriz Moreno says

    Maravilloso homenaje

  6. comment Sandra says

    Me ha gustado mucho esta publicación, me he sentido muy identificada!! Gracias.

  7. comment Silvia says

    Muy muy bueno!!!

  8. comment Fátima says

    Muy bueno, un placer leer articulos tan interesantes.

  9. comment Marta says

    Artículo genial y un buen homenaje merecido

  10. comment Raquel Segovia says

    Fantástico este homenaje. Felicidades por el artículo!!

  11. pingback El sector legal se adapta a las necesidades del cliente - Martín Molina says

    […] la competencia, pero no sólo en el sector legal sino en el mercado en general y transmitirlo a los profesionales del despacho. En definitiva, advierte que “innovar es actitud”. En lo que se refiere a la tecnología, Jordi […]